La reducción de la jornada laboral a 37,5 horas se hará de forma progresiva. Las pymes y empresas de determinados sectores tendrán algún tipo de ayudas.
De esta manera, el recorte horario no será total antes de que acabe 2025, como era la idea de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz.
La CEOE mantiene su preocupación por una imposición unilateral de la medida, por poner en riesgo la viabilidad de las pymes.
Desde la patronal se enfatiza que un 25% de todos los convenios firmados en 2024 ya establecieron jornadas de 37,5 horas.